Antes de valorar un inmueble, hazte cinco preguntas clave
A la hora de valorar un activo, ya sea para comprar, vender o alquilar, siempre hay que hacerse una serie de preguntas previas para determinar qué base de valor es la apropiada para calcular su valoración, pues la línea que separa a unas de otras es tan delgada que en ocasiones lleva a confusión.
Las cinco preguntas que hay que formularse para ir descartando una base de valor de otra son las siguientes:
1- ¿Qué quiero valorar? Cuál es el objeto de la valoración: un inmueble, un local, una nave, etc
2- ¿Para quién es la valoración? Las partes intervinientes: un familiar, un inquilino, una persona con dificultades económicas y que pudieran ser beneficiaria de ayudas…
3- ¿Tipo de transacción? Compra, venta, alquiler, en un mercado particular o hipotético con características específicas, etc.
4- ¿Para qué quiero la valoración? La finalidad es clave porque no es lo mismo que el objetivo sea conseguir financiación bancaria, invertir, repartir de herencia o asegurar un activo.
5- ¿Qué urgencia tengo? El plazo determina si el comprador o vendedor están dispuestos a modificar el precio.